La calurosa mañana sabatina, en la explanada de la sede del Revolucionario Institucional, presagió el buen ambiente que prevaleció durante la concentración a la que se convocó a su clase política, para dar virtual despedida a César Camacho Quiroz, como presidente del Comité ejecutivo Nacional. Y para arropar al primer priísta del país, Enrique Peña Nieto, en la víspera del III Informe de Gobierno y de la sucesión priísta.
La atención, se centró en el mensaje del Presidente, en la señal, que sí envió, para describir al correligionario que será ungido como sucesor del actual dirigente del CEN del PRI; entre la primera fila, acapararon atención, el titular del Poder Ejecutivo; a su derecha, el que entregará en agosto, la directiva; a su izquierda, la secretaria general; enseguida, el hombre fuerte del PRI, en el Poder Legislativo: Manlio Fabio Beltrones.
Desde su lugar, con chaleco rojo, de ropa sport, el político de Sonora, fue el blanco principal de los asistentes, quienes –los que pudieron-, se acercaron para manifestarle aprecio y cortesía, salutaciones que se incrementaron para el diputado, al terminar el mitin tricolor, porque, decenas de jóvenes, sí, jóvenes del partido en el poder, esos que salen a los seccionales, a pedir el voto para el candidato que postula su fuerza política, quisieron saludar y tomarse la “selfie” o la fotografía, con el legislador.
Antes de la reunión de los priístas, testigo del raiting que conserva el diputado Beltrones con la clase política del partido, fue el gobernador mexiquense, Eruviel Avila, quien observó, cómo el sonorense, fue de los más saludados en la cita sabatina-matutina.
¿Casualidad? ¿Coincidencia, que al diputado Beltrones lo sentaran en la cercanía del primer priísta del país? ¡No!, en el primer círculo del poder, son tan cuidadosos de todos los detalles que rodean cada asistencia del Presidente, que saben quién se debe sentar cerca del mandatario y quién no.
Sobre todo, cuando se trata de una magna concentración totalmente política, o cuando se aproxima la víspera de emitir la convocatoria para el proceso interno del priísmo, y elegir al nuevo presidente del partido, para el segundo y último tramo sexenal.
De esa manera, cuidan los detalles en el staff presidencial, para ubicar a quién sientan cerca del primer priísta del país; a la izquierda de Enrique Peña Nieto, el operador legislativo: Manlio, el político que está con el PRI, en las buenas y en las malas; el que encabezó por el PRI, negociaciones con el PAN, en la segunda alternancia, cuando muchos de los que asistieron al acto sabatino y que hoy se protegen a la sombra peñista, se agazaparon. Manlio, el coordinador parlamentario, cuy bagaje, le permitió sortear negociaciones y cabildeos con el PAN-PRI, para discutir, dictaminar, votar y aprobar reformas estructurales que aprobó la ya histórica, LXII Legislatura.
Tampoco fueron casuales las 18 palabras, con las que el Presidente, mencionó al diputado Beltrones y al senador Emilio Gamboa Patrón, en la cortesía inicial de su mensaje de 35 minutos:
-“Y con gran afecto, saludo a los señores coordinadores parlamentarios del PRI en el Congreso de la Unión”, las cuales, propiciaron que miradas de la clase política del partido en el poder, voltearon a verlos; o que los camarógrafos y fotógrafos, hagan su instantáneo trabajo. Entre las múltiples salutaciones previas a su mensaje, de cortesía, sólo dos ocasiones, Peña Nieto, utilizó la palabra, afecto: cuando se dirigió a los jefes de bancada y la otra, para los jóvenes:
-“Saludos, con cariño y afecto, a todas las mujeres, jóvenes y hombres que hacen la fuerza del partido”. Muchas señales, comentó un distinguido priísta, para el político de Sonora, quien, al igual que el Presidente, se dejó querer y arropar por correligionarios jóvenes, y de otras generaciones, que no perdieron la oportunidad de saludarlo.
Epílogo de las cortesías con las que militantes recibieron a Beltrones en la concentración de correligionarios, fue el afectuoso saludo presidencial: contento, por estar con los suyos, con los que contribuyeron a su victoria electoral en el 2012, apenas terminó su discurso, esperado; recién acabó de delinear que “estar a favor del PRI, es estar a favor de México”, y definir que “el PRI, es el partido que está en constante renovación y preparado para seguir construyendo el México del Siglo XXI”, el primer priísta del país, bajó las escalones de la tribuna tricolor, saludó a César Camacho Quiroz y luego, a Manlio, el diputado, de manera efusiva.
Cariñosa muestra de aprecio que el mandatario, ofreció al sonorense: apenas terminaron de saludarse con fuerte apretón de manos, cortés y respetuosamente, el político de Atlacomulco, con la mano derecha, dio un cariñoso toque de mano derecha, al estómago del coordinador parlamentario. Al igual que una fotografía, el aprecio que mostro el presidente Enrique Peña Nieto para el hombre fuerte del partido en el Poder Legislativo, dijo más que mil palabras; elocuente, el gesto que demostró el mandatario, al correligionario Beltrones.
Señales que, en política, mucho significan y denotan.
EN EL PRI, UNIDAD CON EL PRESIDENTE, PARA TRANSFORMAR AL PAIS: BELTRONES.
Un día después del elocuente gesto de cortesía presidencial para el correligionario de Sonora; de la mañana sabatina, calurosa, en la que el maestro de la ceremonia partidista anunció, intencionalmente, con tono emotivo, la presencia de Manlio Fabio Beltrones, éste, en posicionamiento dominical, pondera que a casi tres años de que el PRI recuperó la Presidencia de la República, con Enrique Peña Nieto, el partido se encuentra unido, en torno al proyecto de transformación nacional que su gobierno encabeza.
El coordinador parlamentario –que en el evento sabatino, acudió, contra su costumbre, con ropa sport-, recuerda el mensaje del primer priísta del país, quien dijo, los actuales, son tiempos de cumplirle a México y no de proyectos personales.
“El partido, celebró un encuentro de compromiso y unidad, pues la tarea de transformación está en plena marcha y demanda que cada quien sume su esfuerzo y cumpla sus responsabilidades, sin desvíos, ni distracciones, porque es un momento clave para la vida de la nación”, resalta el jefe del grupo mayor en San Lázaro.
Los priístas, admite el diputado, “así lo entendemos, y en ese sentido, debemos encaminar nuestras tareas”. El coordinador resalta que la actual dirigencia, entregó buenas cuentas a la militancia del partido, “gracias a la labor eficaz y a la consistencia que han mostrado César Camacho Quiroz e Ivonne Ortega Pacheco”. También expone:
“El partido ha mantenido coherencia ideológica, cohesión política y eficacia electoral, para que el programa de transformación nacional que propuso en 2012, el entonces candidato, se haya concretado en reformas que se están aplicando bajo su conducción y liderazgo como Jefe del Ejecutivo”, añade. Beltrones, afirma que su partido, es sólidamente unido, porque la experiencia acumulada “y las que nos dio la alternancia, dota a nuestros dirigentes de una clara visión de las tareas que nos corresponden como partido en el gobierno”.
Refiere que el PRI, sabe hacer alianzas y fue un puntal invaluable, para llevar adelante el proceso de reformas en la Cámara de Diputados, con un acompañamiento solidario, que permitió construir mayorías en la pluralidad y ganar debates decisivos, conservando la cohesión del grupo parlamentario en torno al proyecto transformador del Presidente. Es el posicionamiento de Beltrones, hombre de partido, leal, institucional, cuyo bagaje, lo puso a su servicio, en la alternancia y en la LXII Legislatura. ¿O no?
EN EL CHACALEO.
¿Quién es ese ex gobernador del PRI, que al comentar la fuga del legendario sinaloense, Joaquín Guzmán Loera, lo expresa con temor y con una vehemencia para que lo aprehendan? ¿Por qué será?… No, el primer priísta del país no aludió en su mensaje de 35 minutos que expuso a la clase política y militancia del PRI, la fuga que hoy por hoy, es la vergüenza del grupo Atlacomulco: la de “El Chapo”. Los asesores presidenciales, aconsejaron que en su discurso, el primer priísta del país, no aborde, de cara a los correligionarios, la depreciación del peso frente al dólar, el decreto que emitió el gobernador de Oaxaca, para crear el nuevo Instituto Estatal de Educación Pública –IEEPO-, que el Ejecutivo Federal apoyó, ni un mensaje con dedicatoria para la Coordinadora Nacional del Trabajadores de la Educación –la CNTE-, por su rebeldía de no aceptar que terminen con un feudo que les crearon en 1992, Carlos Salinas de Gortari y Heladio Ramírez López. ¡Vamos, pues!, ni una señal, para identificar quién traicionó a las instituciones y la confianza presidencial, para permitir ese famoso escape… Es decir, el mensaje peñista, fue netamente político, para la sucesión en la dirigencia del PRI y con alusiones para Andrés Manuel López Obrador; prefirió dejar asuntos de su gobierno, en la esfera del Poder Ejecutivo. Salomónica decisión, pero qué mejor que ante sus correligionarios, hablar de lo que atañe a todos los mexicanos, para los que gobierna, como bien lo admitió él, en su mensaje sabatino, ¿verdad?… (www.los3poderes.com)… (juanlopez23@hotmail.com)…