Entre la clase política de Morena, ¡se hartan!, del estilo personal que aplica el jefe máximo del partido y del Ejecutivo Federal, para el proceso interno, tardío, en la sucesión del mando partidista.
Estilo que, imperó en el PRI, en el viejo régimen y en el sistema “neoliberal”; en el PAN, imperó por dos sexenios, donde Vicente Fox y Felipe Calderón Hinojosa, hicieron lo mismo que sus antecesores priistas.
Al mejor estilo salinista de ejercer el poder, con “visión de futuro”, para conservarlo, en el gobierno de la “cuarta transformación”, previeron desde el año pasado, impulsar al discípulo de Marcelo Luis Ebrard Casaubón, para la dirigencia nacional de Morena, el diputado y coordinador del grupo mayor en San Lázaro, Mario Delgado Carrillo, quien, al parecer, cuenta con el respaldo de su nuevo padrino, Andrés Manuel López Obrador.
Recordamos el sexenio salinista en el que uno de sus voceros, difundió que el grupo en el poder, alistaba su permanencia, hasta el 2018. Con todo y Pedro Aspe en la SHCP, los salinistas, ¡nunca! tuvieron “visión de futuro”, para evitar sangrienta sucesión presidencial que se les presentó, ni mucho menos, controversial “error de diciembre”, que hasta la fecha, tiene efectos en la economía nacional y en el bolsillo de los mexicanos.
Hoy, con López Obrador, desde la cancillería y Palacio Nacional, tuvieron esa visión para alistar a Mario Delgado Carrillo, en la dirigencia de Morena y desde ahí, operar candidaturas a cargos de elección popular en el 2021, es decir, el ensayo de la sucesión de Marcelo Ebrard, para el 2024.
Como los salinistas, en este gobierno, tampoco, previeron que un actor político de bagaje, y con aceptación ciudadana, desde su época de priista, como Porfirio Muñoz Ledo, se les atravesara en proyectos a largo plazo y poner en riesgo planes futuristas.
El controversial legislador, se puso en el futuro de Ebrard y el Presidente.
En el proceso interno que tiene Morena, su clase política, como la diputada, Silvia Lorena Villavicencio Ayala y la senadora Minerva Citlalli Hernández Mora y su correligionaria, Martha Lucía Micher Camarena, expresan sus inquietudes y los mismos critican y apoyan a Mario Delgado, que a Porfirio Muñoz Ledo. No callan, como en sus tiempos, callaron priistas y panistas.
Imposiciones como la que pretende la cúpula partidista y del poder sexenal, fue lo que acabó credibilidad y confianza ciudadana para el PAN y el PRI, cuyos Tlatoanis sexenales, ensayaron a su modo, sucesión en el partido que los encumbró; los resultados, los padecen sus militantes y simpatizantes, porque perdieron el poder en la Presidencia y en el Congreso de la Unión.
Es lo que no sopesan el jefe máximo de Morena y del Ejecutivo, ni el canciller Ebrard, quienes a toda costa y costo, pretenden imponer a su discípulo en el mando partidista, para impulsar a la bancada que, a su vez, impulsará en el 2024, desde los distritos electorales federales, candidatura presidencial del actor político, famoso por su colección de finos relojes.
No fue casualidad ni coincidencia, que, ayer, en su foro de Palacio Nacional, el presidente López Obrador, de plano, evitó hablar del candente asunto.
-“¡No!, eso no”, respondió, cuando lo cuestionaron.
-“¿Ninguna opinión al respecto?, le insistieron.
-“¡No!, ¡No!, no opino de eso, para no meternos en la cosa partidista, solamente cuando hay alguna cosa grave, pero no, esto no. Esto es, vamos a decir, algo muy común en los partidos y ya que se pongan de acuerdo”.
Es decir, con estas palabras, el jefe máximo de Morena y del Ejecutivo Federal, “tiró línea”:
Que se pongan de acuerdo en la sucesión de Morena, el INE, Mario Delgado Carrillo, Porfirio Muñoz Ledo, Alfonso Ramírez Cuéllar.
Empero, dudamos que le hagan caso al mandatario, en el partido político que fundó, porque la situación, se pone más candente, conforme se aproxima fecha de tercera encuesta: de pasado mañana, al 22 de este mes.
O sea, en 7 días, se dirime quién gana a quien en la presidencia de Morena.
Por lo pronto, hoy, el INE, confirma esos días para la última encuesta.
¡Híjole!
EN EL CHACALEO
Si el presidente López Obrador defiende su tesis de comer sano en el país, que los mexicanos hagan comidas naturales, libres de azúcares, refrescos, comida chatarra, con salchicha, etc., ¿por qué no convoca o exhorta a la población?, así de sencillo, no consuma refrescos de cola; que salga del país, la empresa que hace pollo frito; que retiren del mercado productos Bimbo; que salgan empresas que elaboran hamburguesas; las que elaboran pizzas… Si el gobierno de Claudia Sheinbaum “madrugó”, al país, con el retiro de la estatua de Cristóbal Colón, la víspera del Día de la Raza, por qué no convocar a que los mexicanos gasten su dinero en empresas trasnacionales y degusten los sopes, el pozole, las quesadillas, tlacoyos, quelites, verduras… Y queda en el Presidente, en Jorge Alcocer Varela y Hugo López-Gatell Ramírez, exigir a esas empresas de Estados Unidos o italianas y mexicanas, pidan disculpas a los mexicanos, por la propagación de diabetes, hipertensión, enfermedades cardíacas, crónico degenerativas, por consumir esos productos. ¿O no?… www.los3poderes.com… Ttwitter: @JuanLopezMiguel… juanlopez23@hotmail.com…