Al final de su sexenio como gobernador del estado, Miguel Alemán Velasco, entregó buenas cuentas al partido que lo llevó al poder y a los ciudadanos que votaron por su candidatura; Veracruz, figuraba entonces como el estado con el puerto por donde ingresan mercancías de importación; entidad petrolera y con amplio potencial turístico; se hablaba de esa parte de la República, como polo de desarrollo, porque el gobernador Alemán, tiene la vocación empresarial que, con éxito, llevó para beneficiar a la entidad.
Luego que el hijo del ex presidente Miguel Alemán Valdés, entregó la gubernatura, están por transcurrir 12 años, en los cuales, la bonanza veracruzana, derivó en tierra de la delincuencia organizada, levantones, ejecuciones, asesinatos contra periodistas; además, contratación de cuantiosa deuda que adquirió el sucesor de uno de los cachorros de la Revolución en el palacio de gobierno.
Del estado, sus habitantes tienen fama por su participación en la política, por lo cual, se comenta que cada veracruzano, podría ser gobernador o Presidente de la República.
Ello, fue más que suficiente para entender a la clase política de la entidad, la que milita en el PRI; su desprecio y desdén para la pandilla que los gobernó, apenas terminó el sexenio alemanista. No es para menos: el grupúsculo que emergió con Fidel Herrera, desde que asumió el mando en Veracruz, ocupó todos los espacios de poder.
Lejos de preocuparles la buena marcha de la administración pública local, de escuchar la voz de los auténticos priístas, esos que hacen talacha en las campañas y llenan lugares en asambleas estatales o municipales, la pandilla de Fidel, los desplazó, los hizo a un lado y sin pena ni gloria, ocuparon cargos lo mismo en el gobierno estatal que en la directiva del priísmo local; en San Lázaro, pero no en el Senado.
Ambiciosos, llegaron a ocupar alcaldías, como la de Tuxpan, tierra nada más y nada menos que del ideólogo del PRI, don Jesús Reyes Heroles, sin que ello importara al señor Herrera, a quien sólo interesó imponer en la presidencia municipal al que le hacía la síntesis de prensa cuando fue senador; otro de la pandilla, más ambicioso, aprovechó vínculos del poder con Herrera y logró imponer, ¡desde Veracruz!, a su hermano, como alcalde en ¡Cuautitlán Izcalli!, Estado de México, con el apoyo del priísmo mexiquense.
La pandilla, fue más allá del sexenio de Herrera Beltrán, para pronosticar su “futuro político”; lograron que Javier Duarte, sucediera a su jefe; cuando se frotaban las manos con que otro de ellos –los que hoy ocupan una curul en San Lázaro-, sería el candidato para el gobierno del estado, en el periodo 2016-2018, y luego, otro de ellos, para el sexenio 2018-2024 y así, entre ellos, con sus herederos, por los siglos de los siglos.
Tan mal trataron a la clase política del estado, que los dos senadores por Veracruz –José Francisco Yunes Zorrilla y Héctor Yunes Landa-, en vísperas de la postulación del candidato para la mini gubernatura, se enfrentaron a Duarte Ochoa, quien ridiculizó al segundo, sin saber que de esa manera, trazó la ruta que, posteriormente, tendría el desenlace del proceso interno para elegir candidato del PRI al gobierno del estado.
Con los antecedentes políticos, económicos, sociales y delincuenciales en Veracruz, desde que llegó al gobierno Fidel Herrera, el Partido Revolucionario Institucional, postuló al senador Yunes Landa, candidatura con la que, el presidente Enrique Peña Nieto y Manlio Fabio Beltrones, terminan con el periodo de la pandilla de los cuatro y, abren posibilidad para que la normalidad política en el estado, retome su cauce, al menos, entre militantes del Revolucionario Institucional, para conservar el poder.
Con la postulación del senador Yunes Landa, el Presidente de la República y el que lo es del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, ofrecieron cátedra política, para los priístas de Veracruz. ¡Vaya!
CON EL DESTIERRO DEL JEFE DE LA PANDILLA, A ESPAÑA, SEÑAL DE SU EXTINCION.
Durante el sexenio de Felipe Calderón, mucho se especuló entre la clase política del país, que Fidel Herrera Beltrán, pisaría un reclusorio de “alta seguridad”, por presuntos nexos con la delincuencia organizada, pero no sucedió nada. Por el contrario, el oriundo de Nopaltepec, se dio el lujo de imponer al que fue su ayudante, secretario privado, particular y gente de confianza, Javier Duarte, como sucesor en el gobierno de Veracruz.
Los cuatro integrantes del clan, no entendieron la señal que les enviaron desde el centro del país, cuando se conoció que el jefe de ellos, se iba de cónsul a Barcelona, España; tan optimistas estaban por retener por un años más, el gobierno y poder en la entidad, que nunca imaginaron que ello, sería antecedente de la derrota política, la cual, sucedió la semana pasada, cuando el CEN del PRI que preside Manlio Fabio Beltrones, informó que el senador Héctor Yunes Landa, es el candidato del partido para el gobierno del estado.
La tercia, hizo lo imposible por tener cercanía al primer priísta del país, para gestionar que cualquiera de los dos que tienen curul en San Lázaro, obtuviese la candidatura; pretendieron colgarse de su coordinador, César Camacho Quiroz, para obtener apoyo político del grupo en el poder y que así como lograron que llegara Duarte a gobernador, uno de los dos, fuera el candidato para Veracruz, en el periodo 2016-2018.
Entre sus gestores para más poder en esa entidad, el zedillista Enrique Jackson Ramírez, quien sí pudo lograr algo: ser miembro de la Comisión Bicamaral de Seguridad Nacional, para hacer contra peso en ese órgano del Congreso, al senador panista por Veracruz, Fernando Yunes, porque el que pretendió la candidatura presidencial del PRI en el 2006, no logró más y sólo fue en lo que aquel ex gobernador mexiquense, lo pudo ayudar.
Con la extinción de la pandilla que por 12 años mantuvo secuestrado al estado donde todos quieren ser Presidente de la República, también acabó ese espacio de poder para Jackson Ramírez, quien con los dos que tiene como compañeros de curul, sólo tendrán que esperar termine la LXIII Legislatura, y con ella, su época de gloria que tuvieron.
¡Ojalá! el PRI nunca más vuelva a solapar este tipo de personajes, que sólo utilizan las siglas del partido, para saciar ambiciones de poder económico y político. ¡Ojalá!
-“Gracias por todo”, espetó respetado e influyente priísta, a Javier Duarte, cuando éste, abandonaba la sede partidista -luego de las 13:00 horas, del sábado 25 de julio pasado-, tras un acto que encabezó el primer priísta de la nación. El gobernador, ni se inmutó ni agradeció la deferencia. De ese nivel, fue la soberbia con la que se condujo en el estado, la pandilla de Fidel. ¡Caramba! Hoy, Duarte, anhela que ese priísta, al que desdeñó saludo, le extienda manto de impunidad por el quebranto político y social que hicieron.
EN EL CHACALEO.
Hoy, en la sesión de la Comisión Permanente, diputados del Movimiento Ciudadano presentan Punto de Acuerdo por el que exhortan a la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente, a realizar puntual investigación de los hechos que se relacionan con la destrucción del manglar “Tajamar”, en Cancún, Quintana Roo e inicien los procedimientos administrativos correspondientes para fincar responsabilidades a servidores públicos que resulten implicados en cualquiera de los tres órdenes de gobierno… Tiene razón Agustín Basave: que la clase política del PRD, se ponga al corriente en el pago de sus cuotas al partido que los llevó al poder, en vez de hacer grilla futurista y ponerse en contra de alianzas que probablemente les den oportunidad de derrotar al PRI en los comicios de este año. ¿O no’… ¿A poco los foros y audiencias públicas para posible regulación del uso de la marihuana, serán para concluir con recomendación al gobierno de su legalización para uso “terapéutico”?, postura coincidente con la tesis que al respecto, vislumbran en la Organización de las Naciones Unidas, para exponer en el foro internacional que alistan para el primer trimestre de este año. ¿Sí?… (www.los3poderes.com)… (juanlopez23@hotmail.com)…