Antes que el virtual Presidente electo de Estados Unidos, perfile relación bilateral que tendrá con nuestro país, luego del mediodía del próximo 20 de enero, cuando asume el cargo, en la ciudad de México, en Palacio Nacional, Andrés Manuel López Obrador, delineó trato que exigirá al gobierno que encabece Joe Biden, apenas lo declaren ganador, próximo 14 de diciembre.
Desafío que, seguramente, el Ejecutivo, volverá a reiterar ese día o después, el cual, con anticipación, encara política que dicte el nuevo presidente de Estados Unidos, hacia nuestro país, en el contexto de buena vecindad y sana relación bilateral con su principal socio comercial, México.
Qué mejor que anteponer en la relación bilateral con Estados Unidos en la era Biden, la Constitución de 1917, y desde ese dictado, sobrellevar, sí, sobrellevar, relación con la nueva administración estadounidense, porque en política, forma es fondo, cual decía el prócer de Veracruz, don Jesús Reyes Heroles, qepd.
Si allá, el futuro mandatario habla de conciliación, reconciliación, sanar deterioro de la administración federal que hereda Trump, de enfrentar pandemia, acabar con el “racismo sistémico”, acá, deberían interpretarlo como nueva directriz de política mundial y mostrar reciprocidad.
Empero, cauteloso, López Obrador, enseña sus armas en materia de política exterior y de buena vecindad con el virtual gobierno de Biden, y no es más que nuestra Ley de leyes: artículo 89, como bien ilustró ayer, por la mañana, en su foro matutino, el político de Tabasco.
Desde ese apartado en la Carta Magna, el mandatario, justifica tardanza en felicitar al ex vicepresidente de Obama, previa observación de que la postura del gobierno mexicano, es esperar que autoridades de Estados Unidos, encargadas del proceso electoral, “decidan sobre el ganador de la Presidencia. Nosotros, no podemos actuar de manera imprudente”.
-“Y no sólo es un asunto de forma, es también de fondo. Yo tengo la facultad y, al mismo tiempo, la obligación de ajustarme al mandato constitucional en cuanto a política exterior y es muy claro el artículo 89 de nuestra Constitución, fracción X, establece que la política exterior, debe guiarse por los principios de no intervención y de autodeterminación de los pueblos; en esencia, es lo que decía el presidente Juárez, el respeto al derecho ajeno es la paz”.
Con esa tesis, el régimen de la “cuarta transformación”, alista encarar relación bilateral con Estados Unidos, apenas asuma el cargo Joe Biden, respaldo constitucional, hay que decirlo, que López Obrador, no empleó, cuando la crisis de migrantes, o cuando el empresario republicano, amenazó con imponer medidas proteccionistas, si México, ¡López Obrador, pues!, no hacía nada por evitar ingresen nuestros connacionales a Estados Unidos, en búsqueda de mejores niveles de vida que, aquí, en su país, ni el PRI, ni el PAN ni Morena, ofrecen.
-“Nosotros, no podemos inmiscuirnos en la política de otros países, de otras naciones. Tenemos que ser respetuosos de la decisión que tomen los pueblos, que tomen los gobiernos extranjeros. Esto no significa que estemos en contra o a favor de nadie”, agregó el Ejecutivo.
Insistente, López Obrador, defendió su tesis, y recordó que en nuestro país, sus antecesores, de inmediato, solían felicitar al virtual Presidente electo de los Estados Unidos, “porque estaban acostumbrados a no respetar la Constitución, estaban acostumbrados a que se opinara de todo, cuando nosotros debemos de actuar con respeto”.
Visión presidencial, defender presunta intromisión del gobierno de Biden, en el país:
-“Porque queremos que, en los asuntos nuestros, no haya injerencia extranjera. México, es un país independiente, libre, soberano. Entonces, no estamos a favor de ningún partido en Estados Unidos”, contexto en el que afirmó que su gobierno llevó buena relación, “de respeto, de no intervención”, con el presidente Donald Trump.
Para callar a sus adversarios, enemigos políticos y atajar versiones de posible distanciamiento con la administración Biden, por tardanza en felicitarlo por virtual triunfo electoral del demócrata, repuso:
-“Y no tenemos ninguna diferencia con el candidato del Partido Demócrata, el señor Biden; ningún problema con él, incluso, lo conocí hace ocho ó 10 años, no tenemos nada en contra del presidente, del posible presidente electo o ahora candidato Biden”, términos en los que López obrador se refirió al que fue rival de su amigo republicano en la contienda presidencial.
Que denotaron lo que, en su conciencia sabe el presidente de México: virtual victoria de Joe Biden en la elección presidencial de Estados Unidos. Las palabras del político de Tabasco, lo expresan.
Sin embargo, se impuso persistencia del Ejecutivo Federal, quien, reiteró, justificó tardanza:
-“Actuar con prudencia. Esperemos que las autoridades resuelvan y, entonces, nos vamos a pronunciar y, a reconocer lo que se decida en las instancias competentes en Estados Unidos de América, eso es básicamente”.
El ex jefe del gobierno, ayer, en su aparición matutina de Palacio Nacional, se vio de mal semblante, y lo entendemos, ¡caray!, ¡cómo no!, si todos quisiéramos que le vaya bien a nuestros amigos, y con ellos, cual tesis del diputado Enrique Ochoa Reza, ¡siempre!, en las buenas; o que a nuestros paisanos, no los afecte la sagrada madre naturaleza, como a los del Presidente, quienes, sábado pasado, reclamaron a López Obrador, como el mandatario lo hacía al gobierno “neoliberal” o “conservador”, en sus tiempos de líder opositor.
Reiterativo, López Obrador, negó visos de distancia entre su gobierno y la era Biden:
-“¡No!, ningún problema, porque tenemos que actuar con responsabilidad, con respeto. Nada más piensen que unos votaron por un partido; otros, votaron por otro partido. ¿Por qué nosotros vamos a actuar con imprudencia? ¿Por qué no esperamos?”.
Al fin político, López Obrador, presagió dirimir diferencias, con su futuro homólogo de los EU:
-“Hay tiempos, ya se va a saber quién va a ser el próximo Presidente y establecemos ya la relación, que no va a ser mala, en ningún caso, va a ser mala; vamos a tener siempre una muy buena relación o procurar una muy buena relación con el gobierno de Estados Unidos, pero no nos vamos a meter”.
Con dedicatoria para sus detractores, adversarios y enemigos político-personales, agregó:
-“Entonces, ¿por qué tanta ansia, tanta desesperación? Prudencia. ¡Claro!, lo mismo, los opositores nuestros, pues aprovechan para decir que no estamos haciendo bien las cosas. ¡No!, estamos actuando con responsabilidad y con apego a principios”.
Y qué principios, ¡eh!, los que dicta aquel apartado constitucional.
Por el bien de nuestro país, de nuestros migrantes, el comercio entre ambas naciones, esperamos que, cautelosa estrategia del gobierno mexicano con el virtual vencedor de la elección presidencial en los EU, manifieste resultados favorables para el régimen y los mexicanos.
¡Ojalá!
EN EL CHACALEO
Con igual fundamento constitucional con el que el jefe máximo de Morena y del Ejecutivo Federal, pide paciencia para que su gobierno felicite a virtual ganador de la contienda por la Presidencia en los EU, el senador Ricardo Monreal Ávila, así lo justificó, en redes sociales, a nombre del grupo mayor en la sede del Paseo de la Reforma, número 135… Ayer, en sesión virtual, la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, acordó calendario para desahogar proyecto del PEF-2021: hoy inician sesión plenaria, presencial, a las 14:00 horas para discutir el decreto; la comisión que dictamina, fundamenta en tribuna, hasta por 10 minutos, la iniciativa; grupos parlamentarios, “a modo”, del partido oficial y de oposición, a través de un legislador, posicionan el documento y registran en la mesa directiva, reservas al dictamen… La discusión en lo general, en dos rondas, 6 a favor y 6 en contra, es decir, 24 oradores, por 5 minutos cada uno; 15 minutos para la votación en lo general, y levantan la sesión, que reinician mañana, a las 11:00 horas, en la cual, discuten reservas, las cuales, si no se desahogan todas, se decreta receso, para continuar pasado mañana, hasta aprobar o desecharlas; en inédita votación, aprueban o desechan, los artículos que reservaron, ¡desde la aplicación en el celular!… En caso necesario, se declara receso y continúan discusión de reservas, el jueves… Por ser virtual culpable de inundaciones en varios municipios de Tabasco, el diputado del PAN, Rigoberto Mares Aguilar, exige renuncia de Manuel Bartlett Díaz, en la Comisión Federal de Electricidad… Su omisión, acusa el panista, afectó a los paisanos del Presidente, por el desfogue de la presa “Peñitas”, lo que propició hasta hoy, más de 90 mil damnificados. “De nada sirve que el Presidente, vaya y sobrevuele la zona afectada, si al malo del cuento, lo tiene como rey en su gabinete. El director de la Comisión Federal de Electricidad es acusado por el gobernador de la entidad, por el desfogue de Peñitas”, señala el legislador de oposición. Si Bartlett no renunció a su trayectoria en el peor momento de su carrera, en el fraude electoral de 88, menos lo hará hoy, cuando bien observa el diputado Mares, es el “rey” en el gabinete del presidente López Obrador. ¡Viva México! ¡Viva!… Twitter: @JuanLopezMiguel… juanlopez23@hotmail.com… www.los3poderes.com…