¡Caray!, ni tres años cumple el presidente Andrés Manuel López Obrador en el poder; distante el 1° de diciembre de este año y más lejano todavía, el 2024, pero eso no importa a quienes el político de Tabasco, desea que a toda y costo, se posicionen en preferencia electoral de los mexicanos, y llegado el momento, uno de ellos, sea candidato presidencial de Morena, para  suceder a quien hoy, rompe reglas de la sucesión.

Reiteramos, a como sea, imponer al país -con tres años de anticipación a la elección federal de aquel año-, a Morena y el candidato o candidata que postule para la Presidencia, porque, hay que decirlo, los que él, desea, están lejos, muy lejos de expectativas que guardan los mexicanos para el próximo sexenio, motivo por el cual, apresurado e incipiente “predestape”.

Formas ocultas del madruguete que el mismo interesado, promueve.

El Ejecutivo, despertó entre Marcelo Ebrard Casaubón y Claudia Sheinbaum Pardo -integrantes de tribu palaciega en Morena-, ambición, avaricia y codicia, por el encargo que, hoy, ocupa su jefe.

Contexto en el que la clase política oficial y de oposición, ejercen virtual campaña, para “posicionarse”, entre opinión pública y ciudadanos que decidirán con su voto en el 2024, si uno de ellos, merece llegar a ocupar la investidura en el siguiente sexenio.

Sin ambages, el padre de la mañanera sucesión, perfila que en 2024-2030, se reelige otro sistema “de transformación”, a como sea, como si el cien por ciento de los mexicanos, coincidiera con ese futurismo.

En esa perfecta idea, entendemos madruguete de Andrés Manuel López Obrador, por adelantar reloj político de su posible “heredero” o “heredera” en la Presidencia.

Cómo decirle a Andrés Manuel López Obrador, que su gobierno, es uno más que el de sus antecesores del periodo “neoliberal” o “conservador”, que en sus cacareadas reuniones de seguridad que lleva a cabo al amanecer de Palacio Nacional, nada más no reflejan estrategias de prevención y corrección en materia de seguridad, para terminar con flagelos de violencia y delincuencia.

Cual prometió con crear la Guardia Nacional, institución que rebasan, por la izquierda y derecha, altos índices de esos delitos.

¿Quién avisará al político de Tabasco, que el cilindro de gas de 20 kilos, se cotiza entre 570 y 600 pesos en zona conurbada de CDMX, donde los ciudadanos, rechazaron más gobiernos municipales del partido que fundó?

De qué manera enterar a Andrés Manuel López Obrador, que asaltos, balaceras, secuestros, extorsiones, es modus vivendi de millones de mexicanos en toda la República, no se diga en zonas con semáforo rojo en esos delitos.

Que no hay medicinas, que necesitan nuestros infantes, adultos mayores, mujeres, y cientos de ciudadanos, para encarar enfermedad crónica.

¿Sabrá el mandatario que transportarse en la combi o Microbús, aumentó de 10 a 12 pesos?

¿Qué las gasolinas están entre 21 y 23 pesos, Magna o Premium?

Que un melón en esta época, de la Comarca Lagunera, Torreón, Coahuila -los más sabrosos del país y del mundo-, cuesta 30 pesos o más, de acuerdo a su tamaño; sabrá cuánto cuesta kilo de jitomate, aguacate; ¡la carne!, 160, 170 pesos, kilo de bistec; ¡tortillas!, 18 pesos kilo, más 50 centavos o hasta un peso agregan, por el papel y bolsa.

Una pieza de pan de dulce entre 7 y 8 pesos; hasta 10 ó 15 pesos, si es de repostería; bolillo, telera, un peso con cincuenta centavos o más, de acuerdo al tamaño y panadería, popular o “fifí”.

Y ni cómo esperar el cilindro que reparta la empresa de su gobierno, “Gas Bienestar”, porque estas dos palabras, son marca registrada.

Esos reportes, comentarios, de ciudadanos que salen de casa a la chamba y no trabajan en Palacio ni pertenecen a tribu palaciega, no interesan al Ejecutivo, porque, sale con  estribillo de “tengo otros datos”, palabras que, encabronan al ciudadano que sí tiene sentido común.

Cuando más requieren los mexicanos de responsabilidad de sus gobernantes, éstos, andan en “precampaña”, por querer a camisa de fuerza, permear su imagen y persona, entre los gobernador; el voto a favor de ellos, en falsa “encuesta” que haga Morena o cuando al “delfín”, lo imponga Andrés Manuel López Obrador, como candidato de su partido a sucederlo en el poder.

En esos menesteres, Claudia Sheinbaum Pardo, cuando resalta tercer “ola” de Covid en CDMX, sin saber qué “semáforo” aplicar, porque la capital del país, hoy, goza de toda actividad productiva; o cuando publicita reunión a la que convocó, con futuras gobernadores del partido oficial.

Ebrard, que promete a la nación, vacuna mexicana contra Covid, cuando esa responsabilidad es de un secretario de Salud, como Jorge Alcocer Varela; cuando debe supervisar atención que ofrecen consulados de México en Estados Unidos, sedes diplomáticas a las que poco falta que cobren a nuestros “héroes anónimos”, cuando acuden a sus instalaciones.

En eso también se dedica, el senador Ricardo Monreal Ávila, cuando ahora se da cuenta que hay que ofrecer apoyo a trabajadores del campo, condiciones jurídicas, en un marco de justicia y legalidad que se refleje en el bienestar integral de ejidatarios, comuneros y “posesionarios”, que reconocen en los núcleos agrarios, con una reforma a Ley Agraria.

Beneficiar a 700 mil personas, con ese proyecto, y otorgar certidumbre a esos connacionales que adquieren derechos sobre la tierra ejidal, a través de mecanismos como el reconocimiento de la asamblea ejidal, resolución judicial o administrativa, compraventa o sucesión.

En prematuro juego de la sucesión, todo se vale, como advertir que Morena “va” en el próximo sexenio, “llueva o truene”; prometer desde la cancillería y no desde secretaría de Salud, vacuna mexicana contra Covid; foguearse, retrato con futuras gobernadoras de Morena y Claudia, tenga “presencia” en esas entidades; prometer a los campesinos, seguridad jurídica en sus tierras, porque el gobierno  de López Obrador, tiene esa omisión.

¡Qué tal!

Siguiente 1° de diciembre, cuando él cumple 3 años en el poder, ¿qué llegarán a ofrecer?

¿Lo mismo: cárcel a expresidentes corruptos, que bajarán precio de gasolina, gas, que no cobrarán en los hospitales del sector salud, que no serán iguales que otros, más “crecimiento” económico, seguridad pública, empleos…?

EN EL CHACALEO

¡Mentira!, que el régimen del presidente López Obrador, no contrate deuda: en solo 29 meses, su gobierno, aumentó deuda pública en 14 por ciento, acusa el dirigente del PAN… Con cifras de la SHCP, Marko Antonio Cortés Mendoza, señala que desde diciembre del 2018 a mayo de este año, deuda pasó de 10 billones 829 mil 907 mpd, a 12 billones 310 mil 822 mdp… “El anuncio de que este gobierno no recurrirá a más deuda pública, es una más de las promesas incumplidas y una más de las mentiras de este gobierno”, añade el panista… ¡Zas!… Para puyar más al mandatario, el presidente del PAN, puntualiza: “López Obrador ha solicitado solo al Banco Mundial, préstamos por 3 mil 855 millones de dólares, cifra muy superior a los 2 mil 231 millones de dólares que solicitó Enrique Peña Nieto a ese organismo internacional, ¡durante todo su mandato!”… “Ahora quieren engañar al pueblo diciendo que ya no hay más deuda, lo cual es una más de sus mentiras”, remata el dirigente opositor… Siguen en el cierre de sus trabajos legislativos, comisiones ordinarias de trabajo en Cámara de Diputados: hoy, concluyen su labor durante LXIV Legislatura -en reunión semipresencial-, Cultura y Cinematografía y Puntos Constitucionales… www.los3poderes.com… Twitter: @JuanLopezMiguel…  juanlopez23@hotmail.com…